En los umbrales del socialismo boliviano: Tristán Marof y la Tercera Internacional Comunista
On the threshold of socialism boliviano: Tristan Marof and the Third Communist International
Andrey Schelchkov*
Resumen
Este trabajo propone una revisión de la trayectoria política del dirigente político boliviano Gustavo Navarro (Tristán Marof) a la luz de nuevos antecedentes documentales y de archivo. De sus antecedentes, el autor realiza también un acercamiento de caracterización provisional sobre la intelectualidad izquierdista latinoamericana de la primera mitad del siglo XX, deduciendo sus complejos y regularmente precarios universos ideológicos
Palabras clave: nacionalismo, marxismo, socialismo latinoamericano, internacional comunista, indigenismo, imperialismo
Abstract
This paper proposes a revision of the political career of the political leader boliviano Gustavo Navarro (Tristan Marof) in the light of new archival and documentary background. Their background, the author also made an approach on the characterization of leftist Latin American intellectuals of the first half of the twentieth century, deducting its complexes and regularly precarious ideological universes
Keywords: nationalism, Marxism, socialism, Latin American, international communist, indigenousness, imperialism
El pionero del movimiento socialista latinoamericano, el boliviano Gustavo Navarro, más conocido como Tristán Marof (1898 — 1979), jugó un rol importante en la formación y el desarrollo de todo el movimiento social izquierdista en su país en el siglo XX. Los trabajos
* Ruso, Investigador del Instituto de Historia Universal de la Academia de Ciencias de Rusia, contacto: [email protected]
sociológicos de Marof formaron la base del socialismo boliviano y del indigenismo izquierdista. Teniendo gran originalidad y gran fuerza de convicción, sus ideas dejaron una profunda huella en el pensamiento social boliviano. En la historia de Bolivia de los años 20 — 30 del siglo XX, el nombre de Navarro-Marof, fue sinónimo de revolución social y de liberación nacional. El actuar politico de Marof formó parte importante de la historia boliviana y refleja todos los virajes y contratiempos de este pais andino.
Entre los estudios que tocan el tema de Marof y del marofismo, merece la pena mencionar la fundamental Historia del Movimiento Obrero Boliviano del "clásico" de la historiografía izquierdista boliviana, Guillermo Lora1, lider del Partido Obrero Boliviano, uno de cuyos fundadores fue Marof. Esta obra fue el primer intento serio de reunir todos los datos biográficos de este personaje y analizar su pensamiento. Otro estudio interesante pertenece al destinguido historiador y filósofo boliviano Guillermo Francovich2. Los estudios especializados sobre Marof aparecidos en Bolivia son relativamente recientes. Una biografía detallada pero escrita en tono apologético pertenece a Stefan Baciu, quien pone a Marof al lado de figuras como José Carlos Mariátegui y Victor Raúl Haya de la Torre3. Un análisis balanceado, basado en fuentes documentales, se puede encontrar en lo que a nuestro juicio es el mejor trabajo sobre el "socialismo embrionario" en Bolivia, de la historiadora Irma Lorini, que dedica bastante espacio de su investigación a la figura de Marof4. Con toda razón, Lorini lo considera una figura clave en el movimiento socialista boliviano de los años 20 - 40.
Este articulo pretende seguir el camino trazado por otros historiadores pero aportando nuevos datos antes desconocidos. El estudio se apoya en numerosas fuentes publicadas5, además de la investigación realizada en el Archivo Nacional en Sucre (sobretodo de los fondos de la Presidencia y del Ministerio del Gobierno de Bolivia)6, del Archivo Genaro Estrada, de la
1 Lora G. Historia del movimiento obrero boliviano. Vol.2 La Paz, 1969.
2 Francovich, G. El pensamiento boliviano en el siglo XX. La Paz, 1984.
3 Baciu, S. Tristan Marof de cuerpo entero. La Paz, 1987.
4 Lorini, I. El moviemiento socialista "embrionario" en Bolivia, 1920 - 1939: entre nuevas ideas y residuos de la sociedad tradicional. La Paz, 1994. P.231 — 251.
5 Gran interés en este tema representan las memorias de las importantes figuras del movimiento obrero latinoamericano, como Liborio Justo, o del primer ministro obrero en el gobierno "militar'socialista" de David Toro, Waldo Álvarez-España, Memorias del primer ministro obrero: historia del movimiento sindical y político boliviano, 1916 — 1952. La Paz, 1986. Stefan Baciu informa que Marof escribió sus "Memorias" en 500 páginas que quiso publicar en España, pero nunca se realizó. Lamentablemente hasta ahora no se sabe en poder de quién están los manuscritos de las Memorias, aunque las notas de los recuerdos que Marof dejó, son tan parciales y poco sinceras y, sobre todo, muy poco ciudadosas, que no se espera mucho de la eventual publicación de las Memorias. - Baciu, S. Op.cit., P. 25.
6 Archivo Nacional de Bolivia. Sucre. PG.1936 - 1939. Caja 12 - 17. T.127 - 156.; Archivo de La Paz. La Paz (Bolivia). Gavetas, no.32.
Secretaría de Relaciones Exteriores de México7 y, finalmente, del Archivo de la Internacional Comunista (Komintern), que forma parte de los fondos del "Centro ruso de la conservación y de las investigaciones de los documentos de la historia moderna"8.
Las relaciones entre Marof y la Internacional Comunista, IC, (y consecuentemente con la URSS), tuvieron un reflejo fatal sobre el desarrollo del movimiento comunista en Bolivia. El estudio de los documentos del Archivo de la Internacional Comunista, nos descubre unas páginas desconocidas de la historia de los países de América Latina. El destino de muchas personalidades de gran destaque, famosos políticos, científicos, escritores, pintores, estuvo directa o indirectamente ligado a las actividades de la IC. La actitud de los intelectuales latinoamericanos hacia la IC variaba con el tiempo y sus relaciones con la IC pasaron varias etapas, de la "pasión romántica" hasta el enfriamiento e inclusive la rivalidad. En los primeros años de su existencia, la IC tiene el objetivo de atraer a sus filas o reclutar simpatizantes entre los líderes intelectuales de las naciones latinoamericanas, pintores, escritores, pensadores. En unos casos, la IC tuvo éxito у el movimiento comunista estaba orgulloso por tener en sus filas destacados representantes de la literatura, arte y pensamiento latinoamercianos tales como David Siqueiros, César Vallejo, Uriel Gracia, Carlos Mariátegui, Pablo Neruda y muchos otros. Más también tuvo fracasos frecuentes relacionados con el cisma en el movimiento comunista en los años 30. Así, se convirtieron en enemigos mortales de la IC, Diego Rivera, Vicente Huidobro, Liborio Justo. Otros, como Tristán Marof, tuvieron una historia más complicada y su camino fue más sinuoso.
Gustavo A. Navarro nació en la noble ciudad de Sucre en 1898, en una modesta pero respetada familia. Muy temprano, desde su juventud, se incorporó a la lucha política. Como recordaba él, a los 17 años de edad publicó la revista Renacimiento Altoperuano, ocupada de cuestiones sociales. Salió un único ejemplar. Navarro era participante del círculo de intelectuales opositores al gobierno autoritario del Partido Liberal que dominaba el paisaje político boliviano desde 1899. Su centro de atracción fue el periódico local El Hombre Libre, conocido sobre todo por haber colaborado en este el destacado pensador, escritor y poeta Franz Tamayo. En 1920 en este periódico comienza escribir un joven periodista Gustavo Navarro que hizo amistades con el famoso Tamayo. En este perído, Navarro se incorpora al Partido Republicano, una unión opositora a los liberales, compuesto de hacendados y clericales, de un lado, y de estudiantes, artesanos, capas medias y bajas de la ciudad, por otro. En esta organización fue un activo participante en la revolución republicana que puso fin al gobierno liberal.
7 Secretaría de Relaciones del Exterior. Archivo Histórico Genaro Estrada. México — (en adelante SRE).
8 Российский центр хранения и изучения документов новейшей истории (РЦХИДНИ) - RCHIDNI, Moscú.
Dentro del Partido Republicano, muy heterogéneo en el momento, Navarro apoyó al lider de la fracción reformista encabezada por Bautista Saavedra quien, desde los primeros dias de la revolución, se enfrentó al sector clerical y latifundista de Daniel Salamanca y José Maria Escalier. En aquella etapa, los saavedristas representaban un fuerte sector de raigambre popular, una facción personalista pero con claro discurso reformista. El joven Navarro participó en la Convención republicana de Oruro, en 1920, donde Saavedra supo ganar la batalla a sus aliados. Con el triunfo de la revolución en La Paz, el saavedrista Gustavo Navarro ocupó durante 24 horas, como él mismo lo menciona, el puesto del jefe de la cárcel de esta ciudad. Este hecho de su biografía fue siempre usado con éxito en contra él, inicialmente por la derecha antisaavedrista y, luego, por los izquierdistas, incluyendo a los comunistas. Por su activa participación en la revolución, Navarro recibió un "regalo" de Saavedra: el cargo y titulo de cónsul de Bolivia en Havre (Francia).
Ya en sus años de juventud Navarro se dedicó a la literatura y al periodismo. Su primera novela Los Cívicos, era un sencillo panfleto abiertamente politizado en defensa del republicanismo de Saavedra. En esta obra, el joven escritor presentó un cuadro impactante de la descomposición social del liberalismo boliviano, que corrompia sus propios principios y bases ideológicas. Apuntaba: "Nada se habia corrompido tanto como la policia... Todos los hombres feroces de provincias, cuatreros y matadores, viciosos y cinicos por instinto reciproco convivian alli, en unión compañera y regalona sin más trabajo que martirizar, cuando caian ciudadanos opositores en sus manos, con los tormentos más horribles"9. Navarro criticaba la hipocrecia de la elite politica boliviana, que pisoteaba los principios declarados de la libertad y de la democracia.
El énfasis de sus primeras obras consistia en la busqueda moralizadora de la justicia y de la verdad. No obstante, junto con el antiliberalismo politico y la prédica ética de sus primeras obras, se destaca la critica al pensamiento sociológico de Alcides Arguedas, el indiscutible idolo de la intelectualidad boliviana de las dos primeras décadas del siglo. Era la critica intransigente al pesimismo social arguediano. Arguedas, por muchos años, se convirtió en una Cartago para Navarro, que algún dia buscaba destruir. Tales fueron las premisas de sus primeras obras: Renacimiento altoperuano, estudios filosóficos, Cantos a Francia y a Bélgica, Poetas e idealistas de Hispanoamérica. Luego, se publicaria obras más solidas y maduras. Las novelas Suetonio Pimienta y La Ilustre Ciudad, contuvieron una fuerte y aplastante critica a las sociedades latinoamericanas. A estas alturas, sus obras ya tienen significación y valor literario, un mensaje claro de su madurez artistica, aunque lo más importante y notable en ellas fueron los temas de agudo interés social y la fuerza de convicción del propio escritor. En 1928, el guatemalteco Miguel Angel Asturias (premio Nobel de literatura) escribió: " Seutonio
9 Navarro G. Los cívicos. Novela de lucha y de dolor. La Paz, 1918. P.43.
Pimienta, es un libro caro por sus observaciones para los que estamos cansados de oir cantar mentiras, de oir desfigurar los hechos"10.
Los años vividos en Europa cambiaron su vida. Navarro llegó al viejo continente con 25 años de edad. El auge revolucionario de post guerra, las inquietudes y búsquedas de la intelectualidad europea, causaron enorme impresión al joven sudamericano. De esta manera describe el estado de la vida social en el período de post guerra mundial: "El drama de la guerra nos ha abierto los ojos y todo nuestro romanticismo desordenado, indisciplinado y trágico, ha caído por los suelos. Todos los ídolos yacen sin vida, vacíos y gesticulantes, al otro lado de una sociedad caduca y sangrienta. La sangre esparcida por el mundo nos ha purificado y las revoluciones están a la orden del día"11. En Europa Navarro evoluciona hacia la izquierda, sus simpatías están al lado del marxismo y del comunismo.
Desde mediados de los años 20, se dedicó completamente a la labor literario-periodística y a la lucha política. Europa cambió no solamente su vida, sino también su nombre. En 1921 inventa un seudónimo extravagante, Tristán Marof. En una entrevista dada en 1967, contó la historia de su "rebautizo": "Fue en París, allá por 1921. Escribí un libro que se llama El Ingenuo Continente Americano y como era cónsul, debía firmarlo con seudónimo, quise hacerlo, naturalmente, con el nombre de Iván, pero un amigo español, Darius Forti, me sugerió que adoptara el nombre de Tristán. Acepté la sugestión y le dí el apellido de Marof, que ni siquiera es ruso, sino búlgaro"12. Marof contaba que inclusive su amigo escritor español Pio Baroja, lo creía ruso13. La posición antiimperialista y de izquierda radical de Gustavo A. Navarro era incompatible con su puesto diplomático y renunció a su cargo.
Ya en su Ingenuo continente americano Marof destacó los principios comunistas del incanato14. El estado comunista en su interpretación es, sobre todo, un estado ético basado en la justicia. Uno de los rasgos del comunismo era un estado productor que desempeña la función económica. En el foco de su crítica de la vida cotidiana de Latinoamérica, están los vicios de su actuar político: el militarismo y la democracia politiquera. Él insiste que el obrero debe sustituir al soldado, y el científico al general. Para que la democracia sea verdadera, debe de ser popular y obrera15. Marof estaba aproximándose hacia el izquierdismo marxista, y su brillante lenguaje y pasión en exponer sus ideas, le crearon el renombre de estrella naciente de la izquierda latinoamericana. Esto llamó la atención de Henry Barbuse y de Román Roland,
10 Baciu, S. Op.cit., P.199.
11 Cit. por Francovich G. Op.cit., P.86.
12 Abecia López V. 7 Políticos bolivianos. La Paz, 1986. P.87.
13 Baciu, S. Op.cit., P. 42.
14 Marof, T. El ingenuo continente americano. Barcelona, 1922. P.140 - 141.
15 Ibid., P.123.
quienes propagaban la revolución rusa y el comunismo. Estos, actuaban como una especie de agentes reclutadotres de intelectuales para la Internacional Comunista. Barbuse envió a Marof una carta entusiasta expresando su alta valoración de uno de sus articulos16. Entre ellos se establecieron relaciones amistosas; Barbuse escribió los prefacios para las obras de Marof y lo introdujo al circulo intelectual de más alto nivel. De igual forma, contribuyó mucho a la reorientación de las búsquedas ideológicas de este joven boliviano, desviándolo del modernismo latinoamericano hacia el marxismo y comunismo. Lo presentó a los lideres europeos del comunismo, que lo consideraron como portavoz y caudillo de los marxistas bolivianos, lo que estaba muy lejos de ser real. En Europa, Marof se integró al circulo de la intelectualidad progresista latinoamericana y española. Su nombre figuró junto a los dioses olimpicos de la intelectualidad de aquel momento: José Ingenieros, Miguel de Unamuno, José Vasconcelos, Miguel Angel Asturias, Victor Raúl Haya de la Torre, fundadores de la Unión Latinoamericana, creada en Paris el 29 de julio de 1925.
Su primer libro con resonancia continental fue La Justicia del Inca, editado en Bruselas en 1926. En este, por primera vez cita a Marx, a Lenin, y habla de la revolución rusa, sosteniendo que "la revolución americana no debe esperar el florecimiento capitalista... el espiritu y la conveniencia deden precipitar la era socialista sin hacerse ilusiones de que un desarrollo del capitalismo seria antes necesario"17. Estaba convencido de que el continente, por su propia naturaleza, estaba destinado al cambio socialista. Marof escribió: "El continente americano es el continente hecho para el socialismo y donde tiene que dar sus más óptimos frutos"18. Y Bolivia, más que otros paises vecinos, estaba preñada de socialismo por las siguientes razones: primero, la mayoria de la población eran indios que conservan en su memoria histórica y en la estructura orgánica de la comunidad, del ayllu, las bases del comunismo incaico. Segundo, era un riquisimo pais por sus recursos naturales, capaces de garantizar el bienestar para toda la población. Si Europa recorrió siglos para llegar al socialismo y comunismo, Bolivia lo tenia por su naturaleza, por su pasado histórico: "Nuestro camino directo es ir hacia un comunismo netamente americano con modales y tendencias propias"19.
Marof idealiza el comunismo incaico20, que estableció la fraternidad y igualdad, pero estaba dispuesto a sacrificar, por estos objetivos, la libertad y democracia que para él eran más que
16 Esta carta de Henry Barbuse fue publicada en el prefacio del Ingenuo continente americano.
17 Marof T. La justicia del Inca. Bruselas, 1926. P.15.
18 Ibid., P.14.
19 Ibid., P.21 -26.
20 Más tarde Marof decia que su referencia a los Incas no era otra cosa que una imagen poética y nunca los idealizaba. - R.F.Abadie-Aicardi, Economía y sociedad de Bolivia en el siglo XX. El antiguo régimen. Montevideo, 1966, p.94.
"un privilegio de escogidos, de capitalistas, de aprovechadores"21. Marof acepta la visión totalitaria del comunismo cuando, para poder transformar la vida económica y social, concibe necesario subordinar toda la vida del individuo a la integridad del modelo social. "Para el triunfo del verdadero comunismo, no basta la reforma de una parte, ni apoderarse de las fábricas o de las minas: es preciso variar armonicamente el sentido completo de la vida de una sociedad". Marof aceptaba las posibles restricciones de libertad individual, tal como lo profesaban los leninistas22.
El socialismo, para Marof, consiste en la nacionalización de los recursos naturales. Propuso el monopolio del comercio exterior para evitar el pillaje del país por el capital extranjero. Esta medida, según Marof, debá crear el capital nacional23. De hecho, se trataba de un capitalismo de estado, que contradecía a toda su retórica socialista y formula así, un lema histórico: "tierras al indio, minas al estado". Esta fórmula "mágica", convirtió a Marof en un líder de envergadura nacional en su país: pasado un año de la publicación de La Justicia del Inca, el Congreso obrero en Oruro lanzó esta misma consigna.
Marof llamaba a la fraternidad latinoamericana y a una revolución continental purificadora. Pero se contradecía a sí mismo: en una página escribía sobre la solidaridad latinoamericana, y en la siguiente no creía en la amistad de los pueblos vecinos cargados con el peso de los conflictos entre ellos. Por ejemplo, como buen patriota boliviano, no podía aceptar ni siquiera la posibilidad de amistad y unión con Chile, que anexó el litoral de su patria después de la Guerra del Pacífico. Concluía su pasaje sobre la fraternidad americana de esta manera: "Si Chile no existiera en Sudamérica, habría paz y mil veces el gran ideal de unión americana podría ser una realidad"24. A fin de cuentas, Marof no era nada más que un nacionalista boliviano encubierto en la terminología marxista.
Durante los años 20, Marof hace propaganda de su idea principal: solamente el comunismo puede ser la solución posible a los problemas nacionales de los países latinoamericanos. En septiembre de 1926 regresa a Bolivia. En enero de 1927, junto con el líder sindicalista Rómulo Chumacero, crearon un grupo de propaganda marxista en Sucre que se llamó Partido Socialista. Luego, en Potosí, organizó el Partido Socialista Máximo con los jefes Marof y Roberto Hinojosa, famoso protagonista de la revolución de Villazón25. Viajó mucho por el
21 Marof T. La justicia del Inca, P.24.
22 Ibid., P.24, 66.
23 Ibid., P.15, 31 - 39.
24 Ibid., P.19.
25 Roberto Hinojosa era una figura destacada en el movimeinto izquierdista latinoamericano en los años 20 y 30. En 1920 fue elegido presidente de la Federación de estudiantes de Bolivia. En 1926 ocupó el cargo del consejero de la embajada boliviana en Brasil. En 1928 fundó el Partido Revolucionario. En junio de 1930 Hinojosa con un grupo de correligionarios ocuparon la ciudad Villazón en la frontera argentina, y declararon la República
interior del pais, haciendo conferencias y reuniones con las organizaciones estudiantiles y obreras. En agosto del mismo año participó en las elecciones al Congreso siendo el candidato del Partido Socialista por su ciudad natal, Sucre.
Su agitada vida de escritor ya conocido en Europa llamó atención de la elite politica boliviana. El gobierno de Hernando Siles (1925 - 1930) le propuso el cargo de cónsul en Londres o la posibilidad de ser elegido diputado al Congreso por el Partido Nacionalista, nueva creación silista. El gobierno contaba con atraer con Marof a las masas populares, sobretodo a obreros y estudiantes, intelectuales. Rechazó la oferta de una forma poco respetuosa y brusca, procando la venganza de las autoridades.26 En febrero de 1927 Marof y su compañero del Partido Máximo, Hinojosa, fueron arrestados. Pasaron 60 dias en la cárcel de La Paz, y luego fueron exilados a Argentina. En defensa de Marof, en el Congreso boliviano se levantó la discusión, pero en vano: solo diez años después pudo regresar a su pais.
Como ya lo indicáramos, las actividades de este grupo atrajo el interés de la Internacional Comunista. El centro moscovita de la IC pidió a Penelón, del Estado mayor en América Latina (Buenos Aires), al información más concreta sobre ellos.27 La IC esperaba contar con la influencia y renombre de ellos entre los sindicalistas y intelectuales de izquierda bolivianos para formar el Partido Comunista en Bolivia. El primer número del órgano de la IC, La Correspondencia Sudamericana, salió con una enérgica protesta contra el arresto y el exilio forzado de Marof. Desde este momento la IC comenzó un trabajo activo con Marof, y obtuvo éxito, convirtiéndose en un simpatizante comunista, lo que demostró en su polémica con Roberto Hinojosa sobre las perspectivas de la revolución en Bolivia28. Hinojosa esperaba levantar la sublevación inmediata en Bolivia y proclamar la República Socialista. En este sentido, Marof colaboraba con Hinojosa en la preparación de una Revolución americana que debia tener su foco en Bolivia y luego expandirse a todo el continente. Según Marof, su grupo trajo de Nueva York 100 carabinas y otros medios. El plan no tuvo resultado dado que Hinojosa se precipitó en la villa fronteriza deVillazón con un grupo armado proclamando la
Socialista en Bolivia. Esta aventura fue acabada por tropas bolivianas y Hinojosa se escapó a Argentina. Desde 1932 estuvo en México, sirviendo al régimen de Lázaro Cárdenas, sobretodo en la propaganda de la experiencia de la reforma agraria ejidal en Comarca Lagunera. En México tiene relaciones amistosas con Trotzky. En 1944, al regreso a Bolivia, durante el gobierno de Gualberto Villaroel, encabeza la Dirección de la prensa, propaganda y información. La oposición lo llamó "Hoebbels criollo". Terminó su vida colgado en el farol frente al Palacio de Gobierno en La Paz al lado del presidente Villarroel en julio de 1946, ver Schelchkov A. Roberto Hinojosa: la historia de un hombre y de un pais Anuario, 2001. Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia. Sucre. 2001. P.25 - 50. Además, Roberto Hinojosa:
¿revolucionario nacionalista o Goebbels criollo?, en Revista Izquierdas, www.izquierdas.cl, 2, junio 2008
26 Lorini, I. Op.cit.,P.233.
27 RCHIDNI. Fondo (F).495, Legajo (l). 122, No.1, Hoja (H).4 - 5.
28 Marof T. La tragedia del Altiplano, P.183
revolución socialista. Marof acusó a Hinojosa de hacer fracasar los preparativos de la gran revolución americana por haber actuado separada y prematuramente29. El programa de Hinojosa, de influencia anarquista, contemplaba la eliminación de impuestos y aranceles, el libre comercio y la organización social a base de la sindicalización30. En esta discusión y en oposición a las ideas de Hinojosa, Marof se yergue como un marxista revolucionario convincente. Criticó las ideas sindicalistas de Hinojosa, indicando la necesidad de formar antes el partido clasista proletario.
Gracias a los contactos con los comunistas europeos y, debido a la actividad política de Marof (Moscú estaba bien informada sobre su vida y sus ideas, los comunistas europeos enviaban a la sede de la IC sus libros y artículos31), la Internacional Comunista presta una atención minuciosa a su personalidad. En Moscu esperaban utilizarlo a él y su grupo para formar el partido comunista boliviano, sección de la IC. En sus documentos públicos la IC manifestaba su solidaridad con el partido de Marof sin darse cuenta que este grupo ni siquiera existía en Bolivia. Marof de su lado, hizo pensar a la IC lo contrario, presentandose como líder nacional de izquierda con una fuerte base organizativa. La IC recomendó a todos los partidos comunistas del continente, desplegar una compaña en la prensa obrera a favor de Marof y de su partido perseguido por "el gobierno fascista" de Hernando Siles.
Tras estar dos años en Argentina, Marof se va a México en 1929, donde trabaja muy ligado a los comunistas. En 1927 conoció en Lima a José Carlos Mariátegui. En su viaje al norte del continente via Panamá, estuvo en Cuba, donde asistió el Congreso Mundial de Escritores. En México dió conferencias en la Universidad junto con Haya de la Torre. El gobierno mexicano publicó estas conferencias en un libro titulado Opresión y falsa democracia. Conoció a Diego Rivera, a Clemente Orozco, a Siqueiros. Pero no permaneció mucho tiempo en el país azteca. Marof cuenta que se mezcló con la política mexicana y un dia lo tomaron preso y, según él, lo quisieron fusilar. La desilusión de los comunistas mexicanos fue grande, más cuando habían previsto un viaje de Marof a la Unión Soviética para estudiar en la Escuela Leninista de Cuadros Dirigentes, experiencia que sería el punto de viraje definitivo en la conversión de Marof32. Sale del país en dirección a Nueva York33. Ahi publica, en 1931, Wall Steety hambre y México de frente y de perfil (libro muy crítico de la revolución mexicana). Luego regresa a Argentina.
29 Baciu, S. Op.cit., P.70.
30 Hinojosa R. La revolución de Villazón. La Paz, 1944. P.25 - 29.
31 En el Archivo de la IC se guarda una colección de los artículos y folletos de Marof. - RCHIDNI. F.495, l.122, No.1.
32 RCHIDNI , F.495, l. 122, No.1, H.4-5; l.79, No.65, H.2
33 Baciu, S. Op.cit., P.45.
Estos hechos afectaron notoriamente los contactos de Marof. En 1930 su nombre estaba entre aquellos "subversivos" que, según el gobierno mexicano, estaba fomentando la compaña antimexicana por todo el continente. Esta acusación contra Marof figuró entre las causas (entre otras de mayor importancia) expuestas por México en su decisión de romper relaciones diplomáticas con la URSS en enero de 1930. Para los mexicanos, Marof era un agente del Kremlin en la campaña contra México.34 El nombre de Marof se asociaba con la URSS y la IC.
En Argentina Marof hizo amistades con Marmaduque Grove, y cuando este llega al poder en la asonada conocida como "República Socialista" (Chile, 1932), le envia a Buenos Aires los billetes aereos para venir a Santiago. Marof no pudo viajar porque fue asaltado por la policia argentina y tuvo que huir35, pero estos contactos y amistades con los socialistas chilenos de tintes anticomunistas, dieron signos muy negativos para la IC.
En 1930, las relaciones con la IC se perjudicaron significativamente. Llegaban a Moscú noticas de que Marof apoyaba públicamente a Trotzky en el conflicto entre este y la dirigencia soviética. Después de una breve pausa sin nombrarlo, en 1932 los documentos de la IC ya lo maldicen como trozkista y como "un intelectual pequeño burgués" etc.36 En el número de octubre de 1932 de la Revista comunista, editada en Buenos Aires, apareció un articulo dedicado a la preparación de la conferencia constituyente (que nunca tuvo lugar) del partido comunista boliviano. En este articulo, que era un programa dado por los camaradas más expertos de Argentina, se destacaba la tarea fundamental de los comunistas bolivianos de luchar contra el marofismo, y al propio Marof se lo pintaba como un demagogo y aventurero politico. Junto con eso, el autor del articulo tuvo que reconocer que Marof todavia tenia gran influencia en Bolivia, lo cual era un mito creado y divulgado por el propio Marof porque, si bien sus posiciones entre los intelectuales eran sólidas, en la clase obrera su fuerza era muy dudosa. A pesar de la critica que parecia no dejar ninguna esperanza de reconciliación con Marof, la IC no queria romper definitivamente con él por la misma causa de estar bajo la hipnosis del mito de Marof como indiscutible lider de la clase obrera boliviana. Por eso, Moscú todavia mantenia la esperanza de reorientarlo hacia una politica más correcta desde el punto de vista soviético.
Dentro de la IC no habia ninguna posición consolidada respecto de Marof. En 1931 durante los preparativos del Congreso internacional antiimperialista, los comunistas europeos confiaron a Marof formar la delegación latinoamericana a dicho evento, lo que provocó protestas de Moscú. Un funcionario de la IC, Berger (Evert), escribió a Munzenberg, que era
34 Sobre rusos y Rusia. Antología documental.Mexico, 1994. P.333.
35 Baciu, S. Op.cit., P.67.
36 RCHIDNI. F.495, l.122, No.4, H.10
organizador del Congreso, que era inadmisible la participación de Marof porque este era un charlatán que no representaba a nadie y siempre trabajaba a favor del imperialismo inglés. La IC proponía sustituirlo por la viuda de Mariátegui. Más todavía, la IC ordenó hacer todo lo posible para impedir la participación de Marof en la actividad37.
Durante la Guerra del Chaco (1932 — 1935), mientras Bolivia se hundió en las olas del chauvinismo y nacionalismo, Marof intervino con posiciones abiertamente antimilitares y pacifistas, llamando a los soldados bolivianos a desertar del ejército. Como resultado de ello, en diciembre de 1932, el gobierno boliviano abrió causa criminal contra Marof por acciones subversivas y amotinamiento. Le quitaron la ciudadanía boliviana y un tribunal militar lo condenó a 6 años de la cárcel38.
La posición pacifista de Marof lo hizo un líder absoluto entre todos los radicales de izquierda. Es curioso que cuando los nacionalistas, como por ejemplo, Carlos Montenegro o Augusto Céspedes, consiguieron convencer a la sociedad boliviana que el monopolio americano de la Standard Oil era el cupable de la guerra con Paraguay, Marof, sin negar los intereses egoístas del capital extranjero, insistiera en que solamente la oligarquía doméstica tenía toda la responsabilidad de la aventura chaqueña. Sin embargo, Marof apoyó la consigna de nacionalización del petroleo: "Si Bolivia expulsara de su territorio a la Standard Oil, nacionalizando sus materias primas y fuentes de producción, seríamos soldados y combatientes, defenderíamos nuestro país junto a los trabajadores"39.
En 1932, Marof fundó en Argentina el grupo marxista Túpac Amaru, el que en su programa declaró una oposición a la aventura militar en el Chaco y subrayó la nacesidad de la unificación de los diversos grupos antiimperialistas para la construcción del primer gobierno socialista en América. En la declaración del grupo, escrita por Marof, sostenía: "Su mayor empeño es fomentar la revolución proletaria y antiimperialista, la única que puede dar libertad a los oprimidos, tierra a los indios y destrozar el bárbaro feudalismo que todavía subsiste en el altiplano boliviano".40 El grupo de Marof reunió en sus filas no solamente a simpatizantes del marxismo, sino a nacionalistas como José Cuadros Quiroga. A pesar de la manifestada simpatía a Trotzky en la disputa interior comunista, el grupo mantuvo contactos con los "estalinistas", como José Antonio Arze, que más tarde será un enemigo intransigente de Marof.
37 RCHIDNI.F.495, l.19, No.181, H.219.
38 Lorini I.Op.cit., P.234.
39 Marof T. La tragedia del Altiplano, Р.164 - 165.
40 Marof T. La tragedia del Altiplano, P.222.
En diciembre de 1934, en Córdoba (Argentina), el grupo Túpac Amaru se unificó con la "Izquierda boliviana", creada en Chile por José Aguirre Gainsborg (que hacia poco habia sido expulsado del Partido comunista chileno), y con los circulos de exilados: "Exilados del Perú" y "Kollasuyo", creando el Partido Obrero Revolucionario (POR) que encabezó Marof. Los lideres del nuevo partido - que se declaró marxista-leninista- tenian un discurso claramente filo-trotzkista.41 No obstante, lo más curioso era la presencia, en aquella reunión de fundación, del Secretario del Partido Comunista de Paraguay, Oscar Creydt, que representaba el gran interés de los comunistas estalinistas por conseguir llevar al nuevo partido a las filas de la IC. La participación de Creydt debia simbolizar la solidaridad internacional de los izquierdistas bolivianos y paraguayos en su lucha común contra la guerra en el Chaco.
En junio de 1935, en la misma iudad argentina, comienzó a salir la revista América Libre editada por los troztkistas argentinos. El redactor-jefe de la revista era Marof. En su segundo número se comunicaba la creación del POR, repitiéndose la famosa consigna de los años 20: "La tierra para quien la trabaja y minas al Estado".42 En febrero-marzo de 1936, en las páginas de la revista bonaerense La Claridad43, se desplegó una árdua polémica entre Creydt y Marof acerca de la estrategia de la izquierda marxista en aquel momento histórico: el primero defendia los nuevos postulados del 7° Congreso de la IC (Frente Popular), y su oponente sostenia la necesidad de la revolución proletaria en Bolivia que, a su vez, era una visión puramente troztkista. Otra vez asombra la delicadeza con que el POR fue tratado por la IC, conociéndose la intransigencia de Moscú frente a cualquier manifestación de simpatias troztkistas. No hay explicación clara de esta linea moderada de la IC frente a Marof, sabiendo de sus posiciones troztkistas asociadas a las de José Aguirre Gainsborg. La podemos entender si comprendemos el interés de la IC por conquistar una base sólida en Bolivia apoyandose en Marof, sobretodo después de la dura y frustrante experiencia con el llamado Partido Comunista Clandestino, de Carlos Mendoza Mamani, en el periódo de 1929 a 193244, que dejó de existir después de los arrestos de sus lideres, y que no tenia ninguna base popular fuerte para poder permanecer dentro de la politica boliviana.
En 1935 Marof editó en Buenos Aires un libro que ganó mucha popularidad La Tragedia del Altiplano. En él desarrolló algunas ideas que ya antes habian sido expuestas. En el centro de su analisis socio-politico de la realidad boliviana estaba la cuestión indigena. Citando a
41 Formalmente el POR se declaró trotzkista y se aderió al IV Internacional solamente en 1938.
42 Justo.L. Bolivia: La revolucion derrotada, Cochabamba, 1967. P.102.
43 La revista Claridad salia en Buenos Aires desde 1922 bajo la redacción de Antonio Zamora y era una tribuna del partido comunista local, dirigida hacia los intelectuales y otros "aliados de clase".
44 Alipio Valencia Vega (también conocido como Iván Keswar) insiste en 1928 como fecha de la fundación del partido, pero los documentos de la IC claramente indican que este grupo apareció después del marzo de 1929 -RCHIDNI, F.495, L.79, No.153, H.4-5.
Mariategui, Marof subrayó que el problema indígena consistía no solamente en la educación e instrucción indígena, sino en la liberación efectiva del indio devolviendo a los indígenas las tierras usurpadas por los blancos y criollos desde los tiempos de la Colonia hasta su actualidad. Marof estaba convencido que el indio era un socialista y colectivista por naturaleza y, por lo tanto, podía ser el fundamento para la formación de la futura sociedad socialista en Bolivia. El deber de los revolucionarios, escribió Marof, era crear en los indígenas una "vanguardia, vincularlos con los mineros y los estudiantes"45.
La solución de los graves problemas de Bolivia, según Marof, pasaban por la realización del programa de la transfromación socialista en cuyo centro estaba la nacionalización de las minas, del petroleo, de los ferrocarriles. Estaba convencido que este programa sólo puedía realizarse por medios violentos y una revolución social, rechazándose los principios de la propiedad privada. "Minas, petróleo, caídas de agua, suelo y subsuelo, es propiedad social de los trabajadores, de los que aran, siembran, recogen la cosecha y horadan las minas"46. En este libro Marof por primera vez expuso el programa marxista de la revolución: la reforma agraria, la liquidación del latifundio a través de la colectivización de la tierra, la socialización de los medios de producción y, al final, la industrialización. En caso contrario, escribe, se cumple "la sentencia histórica del desarrollo capitalista: países retardados y ricos son presa del imperialismo", y seguirán siendo pobres y atrasados47. Marof fue el primero en Bolivia que perdió la fe en el progreso por la via capitalista.
En La Tragedia de Altiplano Marof expuso su esquema, tan frecuentemente citado y fuertemente criticado, en que describió la estructura socio-clasista de Bolivia. No cabe duda que su idea de dividir a la sociedad boliviana en tres clases —blancos, mestizos e indígenas48-, era una obvia simplificación indigenista y pseudo-marxista del cuadro social real de Bolivia. Lo que era una correcta metáfora literaria perdía sus dotes y no resistía a la crítica científico-sociológica. Todo el mundo hizo sus críticas a esta teoría. No obstante, a pesar de sus evidentes fallas, los bolivianos veían en esta fórmula literaria una expresión muy cercana a su realidad nacional. Marof, en forma simple, pero clara y precisa, muy al estilo pseudo-marxista de los slogans, expresó prácticamente lo mismo que escribían todos los indigenistas bolivianos desde Franz Tamayo hasta Humberto Palza y Carlos Medinaceli. Subrayando el antagonismo entre los indígenas y el mundo blancoide-mestizo, Marof escribió: "El indio no tendrá aliados sino cuando las circunstancias especiales le deparen. Su liberación depende de dos cosas: de su firme deseo de organizarse para la insurrección y tomar la tierra, y de la descomposición de la
45 Marof T. La tragedia del Altiplano, Р. 53.
46 Ibid. P.109.
47 Ibid, Р. 82 - 84.
48 Ibid, P.19 - 21.
clase dirigente, incapaz de tenerse en pie"49. Dando este cuardo clasista-racial de la sociedad boliviana Marof, desde punta de vista del marixsmo-leninismo propagaba la herejia, simplificando la teoria de la lucha de clases. No obstante, asi indicaba el punto más debil de todas las teorias izquierdistas eurocentristas, incluyendo del marxismo, que ignoraban la estratificación castista-racial de la sociedad latinoamericana, donde estaban ausentes los grupos y capas sociales intermedias que permitiesen mantener el equilibrio y la flexibilidad de cualquier sistema social.
En este libro, Marof, una vez más, claramente subrayó que la lucha por una nueva Bolivia podia librarse solamente dentro de la confrontación contra el capitalismo y el imperialismo: "La propiedad privada nacional-señalaba- no puede hacer su curva en estos paises sin caer en brazos del imperialismo extranjero. La propiedad tiene que convertirse en propiedad social"50. Destaca las tareas primordiales de la revolución antiimperialista y antifeudal que estaban determinadas por sus fuerzas motrices - proletariado e indigenas campesinos- que debian confrontarse contra la casta de los explotadores -herederos legitimos de los conquistadores españoles - los blancos-criollos, fieles aliados del imperialismo foráneo.
Con este texto dió inicio a todo un movimiento intelectual y social en Bolivia, el indigenismo izquierdista, que buscaba una sintesis con el marxismo. No obstante, el propio Marof, aunque usaba terminologia marxista, se inclinaba hacia un indigenismo moderado. En un articulo51 aparecido al mismo tiempo que La Tragedia del Altiplano, asi lo atestigua. A veces nos parece que estamos leyendo no a Marof, sino a su perpetuo rival, Alcides Arguedas, al que odiaba. Asi, por ejemplo, escribe: "En la realidad, la vida de Bolivia se mantiene gris, opaca y sin brillo. Grandes talentos no existen. Grandes creadores tampoco. Ni siquiera grandes bandidos. Todo es mediano, achatado, sin color y sin matiz"52. Parece que abrimos las páginas de La raza de bronce.
En Bolivia, durante la Guerra del Chaco y después de las hostilidades bélicas, funcionó un "Comité pro-retorno de Tristán Marof' compuesto por lideres sindicales e intelectuales de izquierda. Sus partidarios esperaban que su retorno al pais iba a impulsar el inicio de una revolución social o, por lo menos, se formaria un partido proletario masivo, la base del cual podria ser el POR. Para Marof, el POR en Bolivia debia perder su carácter cerrado y estrictamente clasista; preferia ver un partido de masas policlasista sin la disciplina feroz y sin rigidos principios. Estas ideas sobre el futuro del POR entraban en conflicto con las de José Antonio Gainsborg que profesaba la tarea de la construcción del partido proletario clasista.
49 Ibid., P.53.
50 Ibid., P.111.
51 Se trata de la introducción al libro de Ricardo M.Setaro Secretos de Estado Mayor, publicado en 1936.
52 Setaro R.M. Secretos de Estado Mayor. Buenos Aires, 1936. P.13.
En el futuro, esta diferencia entre las ideas de ambos llevaron al conflicto interno en el POR y a la ruptura de Marof con el troztkismo.
En marzo de 1936, estando en Argentina, una vez más entra en contacto con los comunistas pro-Stalin. El representante de la IC, un tal Morales, bajo cuyo nombre estaba Orestes Ghioldi (que vino a Buenos Aires de Moscu en 1934 para ser el representante de la Casa, Moscú), envió aVan Min, del Buró de la Comisión Ejecutiva de la IC (organismo máximo de la IC), una carta confidencial en la que expuso sus propuestas respecto de Marof. En esta carta, Ghioldi indicaba que como en Bolivia todavía no había un partido comunista y la influencia de los grupos comunistas de orientación moscovita era muy escasa, el partido argentino53 tentaba conquistar influencia entre los partidarios de Marof. Con este fin, en 1935, los comunistas argentinos (por medio del comunista paraguayo Oscar Creydt) habían entrado en contacto con Marof quien, de su parte, les había aseguró que había roto con el trotzkismo.
En 1936, escribe Ghioldi, Marof restableció relaciones con el partido argentino. Esta vez el propio Marof les propuso crear el partido comunista en Bolivia. Más todavía, Marof, para establecer los contactos más fuertes y duraderos, les propuso viajar a Moscú junto con su compañero y también activista del POR, Ivan Keswar (Alipio Valencia Vega). Esta vez las propuestas de Marof provocaron muchas dudas. Ghioldi caracterizó a Keswar como un hombre serio, de buenos principios, con el cual se podía trabajar en el futuro, subrayando que ya militaba en el grupo comunista de La Paz, pero que había sido equivocadamente expulsado durante la "purga de los intelectuales" en los partidos sudamericanos, en 1929 (especialmente durante la campaña de la IC contra la CROP, creada por José Antonio Arze)54. Al contrario de Keswar, según la opinión de Ghioldi, Marof era un politiquero perdido y agobiado por un amor propio desmesurado. No obstante, contando con el hecho que en Bolivia no existía un partido comunista y sería muy deficil crearlo sin la participación de Marof, Ghioldi propuso ceder en cuestiones de principios y hacer alianza condicional con Marof para poder fundar en Bolivia un PC de masas. De otra parte, esto asestaría un rotundo golpe a los troztkistas del POR encabezados por Aguirre Gainsborg, quitandoles las masas que, según él, seguían a Marof. Las condiciones que impuso la IC a la visita de Marof y Keswar a Moscú, era el rompimiento público con el troztkismo, una abierta solidaridad con la URSS y la aceptación de las decisiones del 7° Congreso de la IC sobre el Frente Popular55.
53 Después del 7° Congreso de la Internacional Comunista y después de la liquidación del Buró Sudamericano, el trabajo y la política de la IC en Bolivia fueron encargados al partido comunista argentino.
54 Lo curioso que si Keswar siendo ya de tendencia troztkista recibió el perdón de la IC. Otros expulsados, "intelectuales pequeños burgueses", como José Antonio Arze y A.Mendizabal, a pesar de su "stalinismo" declarado nunca fueron "perdonados" por Moscú.
55 RCHIDNI, F.495, l.20, No.353, H.3
La carta de Ghioldi no es único testimonio de las tentativas de Marof por entrar en contacto con Moscú en 1936. Una anónima, pero pasada por altos jefes, "Carta informativa sobre la situación en Bolivia", derrama la luz más clara sobre un lado poco conocido de este asunto. En marzo de 1936, en Bolivia, estaba preparándose un golpe contra el gobierno de J.L.Tejada Sorzano. Estaba claro que los dias de este ya estaban contados. Los revolucionarios discutian las lineas generales de la politica futura. Los principales conjurados eran los militares, con German Busch y David Toro a la cabeza (aunque este último iba a insistir en su inocencia), y los socialistas de Enrique Baldivieso (La Confederación Socialista)56. Los socialistas propusieron a Marof entrar al frente "revolucionario". Marof puso como condición para compartir el poder con los militares y los socialistas, que se precindiera de los saavedristas, que formaban parte del bloque revolucionario. El problema que quedó sin resolver fue el de la nacionalización del estaño. Tanto Toro como Baldivieso consideraban que tal nacionalización era imposible sin asegurar los mercados en el exterior. Según ellos, la URSS podia ser una alternativa a los mercados occidentales. Dicidieron enviar a Moscú a Marof y Keswar para entrevistarse con los lideres soviéticos y proponerles su plan de acción. Se subrayaba que en caso de respuesta positiva, el nuevo gobierno nacionalizaria los monopolios mineros57. Parece que este era el objetivo real que queria conseguir Marof al establecer los contactos con el Partido argentino y, consecuentemente, con Moscú. Sin embargo, los acontecimientos corrian más rápido que el correo y la toma de decisiones en Moscú. Marof quedó desconectado de los conjurados y asi perdió también el interés sobre la IC. Esta historia no tuvo su continuación y el segundo plan de viaje de Marof a Moscú fracasó. Los militares, en alianza con los socialistas, llegaron al poder en mayo de 1936 como resultado del golpe revolucionario y estabelecieron en Bolivia el régimen del "socialismo de estado".
No encontramos más detalles del asunto en la carta de O.Ghioldi a Moscú. Además de los problemas técnicos de comunicación con Moscu y de la falta de información en la IC sobre la realidad politica boliviana, Moscú no confiaba mucho en su corresponsal: Ghioldi era considerado un intelectual y un comunista no suficientemente duro. En Moscú, las cartas firmadas por él tenian un cierto grado de desconfianza y no dieron paso a su informe que nunca llegó a las máximas autoridades soviéticas. Se agravó el asunto con la adversidad de la IC hacia propio Marof, que era figura principal en toda esta historia. Si bien la IC no lo siguió tildando de troztkista, igual lo llamaban "un escritor burgués"58. Es posible que la IC ganara más con su negativa de utilizar a Marof para sus fines, porque si lo hubiera conseguido, habria sido muy incierta la perspectiva de cualquier partido encabezado por Marof. Asi, es probable que la IC haya evitado otro fracaso suyo en Bolivia. Los acontecimientos en el pais andino se desarrollaban demasiado rápidos y la IC no conseguió estar al dia para reaccionar dentro de
56 El líder del POR José Aguirre Gainsborg militaba en la Confederación Socialista.
57 РЦХИДНИ, ф.495, оп.122, д.4., л.13
58 Проблемы Южной и Караибской Америки (Problemi Yuzhnoi y Karaibskoi Ameriki). М.,1934, с.240.
un panorama complicado y a veces confuso. Después del golpe militar-socialista de mayo de 1936, Marof se hundió totalmente en la lucha política interna y sus contactos con la IC no se renovaron.
En septiembre de 1937 Marof regresó a Bolivia59. Era ya otro país, muy diferente del que abandonó en 1927. Por todos lados se discutían los temas del socialismo, de la justicia social, sobre nuevas formas de la democracia, sobre el estado funcional. El poder pertenecía a los militares ysocialistas, que declaraban su deseo construir una "república de los trabajadores", la república socialista.
Todos los políticos de izquierda esperaban de Marof un esfuerzo para reunificar y consolidar todas las fuerzas socialistas. Sin embargo, este líder-mesías, en vez de hacer el llamado a la unión de la izquierda, declaró que venía a Bolivia a combatir el estalinismo60, produciendo una grande desilusión dado que muchos izquierdistas no se intereaban por las disputas doctrinales en el movimiento comunista internacional.
Al llegar a Bolivia Marof se dirije a Sucre donde vive su madre. Se aloja en la quinta de su hermana, con guardias policiales a la puerta y no se le permite salir de la ciudad. Esta medida policial provocó protestas de las organizaciones sindicales y estudiantiles que llamaron al Presidente German Busch (1937 —1939) a poner el fin a las persecusiones del más conocido revolucionario boliviano61. Lo visitó Jaime Mendoza, quien solidarizó con Marof. El Presidente se expresó a favor de Marof, y la policía tuvo que excusarse, explicando que nunca quiso arrestarlo ni limitar la libertad del político62. Mientras tanto, el Estado Mayor por órden de Busch, envió a Sucre a su representante, el coronel Garrón para conversaciones confidenciales con Marof con el fin de aclarar sus planes e intenciones, tratando de ganarlo para el gobierno. Marof aseveró su lealtad al régimen y expresó su deseo de colaborar con los militares "con toda la cordialidad y espíritu de harmonía". También declaró que todos sus escritos, libros e intervenciones, estaban nutridas del más "profundo y sincero nacionalismo". Para evitar los malentendidos con el gobierno, pidió una audiencia personal con el Presidente Busch o con otro alto dirigente del estado con el fin de convencerlos de "su sincero afán de colaborar con el régimen socialista"63.
59 En sus recuerdos del año 1969 Marof se equivoca indicando que regresó a Bolivia en 1938. - Baciu, S. Op.cit., P. 47.
60 Alvarez España, W. Op.cit., P.137
61 Carta del Ministerio del Gobierno a Germán Busch de 11 de noviembre de 1937 - ANB.PG. 1937.C.13. T.156. (PG6875). G-2-1.
62 Carta del Ministerio del Gobierno a Germán Busch de 24 de noviembre de 1937 - ANB.PG. 1937. C.13.T.158. (PG7240). G-1-289.
63 El informe del coronel Garrón al Estado Mayor de 22 de noviembre de 1937. - ANB.PG. 1937. C.13.T.166. (PG7217).
Busch dicidió aprovechar los servicios del politico influyente y, al mismo tiempo, alejarlo del pais. A Marof le fue encargada una misión en México64. Sin embargo, el gobierno argentino no le dejó pasar por su terrotorio, y las autoridades bolivianas locales en la frontera recordaron las acusaciones penales contra Marof durante la Guerra del Chaco y lo arrestaron en Villazón. En mayo de 1938 tentaron armar un juicio en Tarija contra él.65 Marof, en los años 60, recordaba que lo querian fusilar y que se salvó por milagro66.
Busch le prestó apoyo y lo autorizó a llegar a la capital en agosto de 1938. Esta desición fue tomada bajo fuerte presión de la izquierda, incluyendo los socialistas, y a pesar de la ola de protestas de la alta sociedad y de los politicos y militares conservadores que habian atraido a sus empeño inclusive a la mujer del Presidente. A Busch le visitaron las delegaciones del clero, de los industriales y de "la sociedad de mujeres católicas", suplicando al Presidente prohibir la entrada de Marof a la capital. No obstante, Busch fue intransigente en su decisión.
La llegada de Marof fue aceptada con mucho entusiasmo por intelectuales y politicos de izquierda y por los obreros de La Paz. Mientras los diarios más grandes ignoraban este acontecimiento, los periódicos de izquierda nacionalista, La Noche y La Calle, dedicaron a Marof vastos articulos en los cuales reconocian en su figura a un lider nacional de la clase obrera. Marof obtuvo audiencia en el Palacio de Gobierno donde fue muy amablemente recibido por Busch. Ambos quedaron contentos con la conversación67. Esta visita llegó en momentos adecuados para Busch, quien vivia momentos dificiles: toda la intelectualidad, los estudiantes y la izquierda, lo boicoteaban después del escándalo con Alcides Arguedas cuando, en respuesta a la critica del escritor, lo agredió hasta darle bofetadas. Para Marof estas circunstancias eran una oportunidad que no podia perder para manifestar su desprecio y odio a Arguedas. Por eso esta visita fue comprendida por todos y Marof no fue objeto de crisitcas.68
En La Paz, Marof comenzó su labor de formar un partido obrero de masas. En sus planes estaba convertir al POR ya existente en un partido abierto, amplio, popular, de masas. Contra estos planes estaba José Aguirre Gainsborg, quien promovia la idea de un partido de clase, un partido del proletariado. En octubre de 1938 Marof se enfrentó con José Aguirre Gainsborg en una discusión sobre los principios acerca de los caminos de la revolución en
64 Informe de la Dirección general de la policia al Secretario de la Junta de 24 de enero de 1938 - ANB.PG. 1938. C.13.T.198 (PG7528)
65 Nota al Ministerio del Gobierno de 6 de mayo de 1938 - ANB.PG. 1937. C.13.T.200. (PG6869). B.1015.
66 Baciu, S. Op.cit., P.48.
67 SRE.México. Legación en Bolivia. Informes politicos reglamentarios. 1938. Informe de 26 de agosto de 1938. 30 - 3 - 15.
68 Ibidem.
Bolivia: inicialmente expusieron sus puntos de vista por escrito y los divulgaron entre sus correligionarios y luego se juntaron en una reunión en la casa de Eduardo Arze Loureiro (uno de los futuros dirigentes del PIR y acerrimo enemigo del POR). Esta reunión fue proclamada como la Segunda Conferencia Nacional del POR, la que produjo una ruptura difinitiva entre los marofistas y el POR. Marof se fue del POR con la mayoría de sus miembros y creó el Partido Socialista Obrero Boliviano (PSOB). A este nuevo partido se unieron E.Arze Loureiro, A.Valencia Vega, A.Mendez Lopez. Después de la inesperada muerte de José Aguirre Gainsborg, el POR pudo regenerarse en 1939 bajo los nuevos liderazgos de Guillermo Lora y Tomás Warki (Oscar Barrientos).
El PSOB de Marof era un partido policlasista. Lo saludaron los partidos nacionalistas y reformistas, inclusive La Calle, que subrayaba el éxito de la creación de un partido moderado por un líder que confirmaba con su vida y su lucha, la dedicación a los principios nacionalistas y de la justicia social de acuerdo a la realidad boliviana69. El manifesto del nuevo partido declaró que la única posibilidad de salvación de Bolivia era establecer la economía socialista y defender las riquezas naturales apoyándose en la unión del pueblo con el ejército. En el manifesto del partido escribió: "El noventa y cinco por ciento de los bolivianos quieren un gobierno eminentemente socialista que saque al país de su marasmo, de su inercia y de su espectacular pobreza".70 Los marofistas decididamente apoyaron a los militares-socialistas y al gobierno del país, tal como fue el acuerdo entre Marof y coronel Garrón. Según la investigadora Irma Lorini, "lo que buscaba Marof era corregir el aislamiento en que habían caido algunos intelectuales de izquierda, encerrados en discusiones teóricas y doctrinarias, sin advertir el proceso histórico que vivía Bolivia en la etapa de la pos-guerra"71.
El PSOB declaró su pluralismo político como principio del nuevo partido. Se proponía crear una confederación de partidos y grupos socialistas que luego debeían fundirse con el PSOB. La creación del PSOB fue apoyada no solamente por los marxistas, como Ivan Keswar (Alipio Valencia Vega) o Eduardo Arze Loureiro, sino también por muchos intelectuales de izquierda, indigenistas y nacionalistas. En el PSOB militaban el pintor Cecilio Guzmán de Rojas, el poeta Guillermo Viscarra Fabre, el escritor Carlos Salazar. Entre los firmantes del manifesto de la creación del partido están los nombres de Waltar Guevarra Arce (futuro líder del Movimiento Nacionalista Revolucionario, autor del documento programático del MNR, el "Manifesto de Ayopaya"), A.Mendoza López (uno de los líderes de la Confederación Socialista y dirigente activo del Partido de la Unión Nacional en los años 20), R.Villaroel Claure (líder obrero, escritor y diputado de la Convención del 1938)72. Al PSOB se unieron el famoso indigenista, fundador de
69 Hudson J.W. Bolivia, press and revolution, 1932 - 1964. New York, 1986. P. 62.
70 Justo L. Op.cit.P. 103.
71 Lorini I. Op.cit., P.229.
72 La Calle. 06.11.1938.
la escuela-ayllu en Warisata, Elizardo Pérez. El marofismo evolucionaba hacia un nacionalismo e indigenismo de izquierdas, alejándose el marxismo. Incialmente, el PSOB tuvo mucho éxito. Según las observaciones del embajador mexicano, el partido de Marof superaba en número de afiliados a todos los partidos que se llamaron de izquierda, incluyendo los influyentes republicanos socialistas (ex-saavedristas) de Gabriel Gonsalvez.73 El PSOB tenia su propio periódico La Batalla y Marof fue electo al Congreso por Sucre.
Marof trató de apartarse de su pasado marxista. Declaró que nunca habia formado parte de ninguna organización internacional comunista74. Escribia articulos en los periódicos y dictaba en conferencias explicando el contenido de sus "nuevas ideas" sobre las peculiaridades del socialismo boliviano que era, según él, el fruto de la unión de los esfuerzos de la clase obrera, de los campeisnos indigenas y del capital nacional bajo la tutela y dirección del estado boliviano75. Este socialismo era una copia del de los militares, camuflado en frases comunes que enmascaraban el olvido de las tesis sobre la nacionalización de las minas y de la reforma agraria. Marof hablaba sobre el perfeccionamiento moral como único camino de las transformaciones sociales.
Este viraje del marxismo trotzkista hacia posiciones moderadas es explicable. Realmente nunca fue trotzkista, ni stalinista, ni marxista. El marxismo, inclusive en su forma primitiva y doctrinaria-vulgar, no lo aceptó como su visión del mundo. Durante su discusión con el periodista conservador y lider de los republicanos genuinos, Demetrio Canelas, en el Colegio Ayacucho en La Paz, para el asombro común de los presentes, no pudo explicar que era "valor adquirido", según Marx. Su actitud era algo tipica de la intelectualidad izquierdista y radical de América Latina. Otro trotzkista argentino, Liborio Justo (Quebracho), hijo del presidente Justo, llamó a Marof "un liberal socializante". En 1939 Liborio Justo escribió a sus amigos bolivianos:
No podemos sino plantear nuestro absoluto desacuerdo con su defensa de Tristán Marof y del Partido Socialista Obrero Boliviano. Yo conozco suficientemente a Marof para asegurarle que nada tiene que ver con el marxismo, es en este sentido que nosotros lo hemos atacado y continuaremos haciéndolo precisamente para evitar engaños y confusiones, no por cuestiones personales que nunca las hemos tenido con él de ninguna clase.
73 SRE. 30 - 3 - 16.
74 La Calle.13.11.1938.
75 La Calle.16.11.1938.
Desde su desacuerdo con Aguirre Gainsborg, a raíz del Congreso del POR, Marof puso en evidencia su tendencia hacia un "...socialismo difuso, vacuo, localista, lindando con liberalismo burgués y que nada tenía que ver con el socialismo marxista, de clase, revolucionario. El hecho de que los estalinistas del PIR atacasen a Marof, no es una demostración de que siga una línea revolucionaria. Como no lo demuestra tampoco el hecho de que Marof y su partido ataquen a los estalinistas".76
De otro lado, Guillermo Lora reconocía que en América Latina los trotzkistas se hicieron de adherentes no tanto porque quisieran que luchar contra Stalin por la "pureza" de las ideas marxista-leninistas o contra su tergiversación burocrática, sino a quienes no compartían las ideas marxistas y que, con el tiempo, también abandonaron las filas del trotzkismo.77
En 1938 Marof publicó el libro La verdad socialista de Bolivia donde abandonó completamente sus posiciones anteriores. El libro fue editado por Fernando Siñani, futuro miembro del PIR, declarado estalinista y enemigo de Marof. En este libro repite sus tesis sobre el inevitable arribo del socialismo a Bolivia, pero el socialismo va a ser un socialismo nacional, siendo una fase más amplia que el socialismo obrerista78. Ahora estaba contra la nacionalización de la minería y apoyaba la estrategia económica y social del socialismo militar (dos años después de criticarlo fuertemente). Subrayó que lo más importante en el socialismo boliviano era el estado antiimperialista y, por eso, la tarea del momento de la izquierda era el apoyo incondicional a ese estado, al gobierno militar-socialista79. Las masas obreras apoyaron la alianza concordada entre Marof y Busch, esperando del régimen "socialista" las reformas radicales. Este apoyo a Marof se concretizó en la colecta de dinero por los obreros paceños para financiar la publicación de este libro80.
La unión con el régimen de Busch fue de corto plazo. El pretexto para romperla fue el llamado "putch marofista". El 23 de noviembre de 1938, en La Paz, hubo una recepción en la Casa de España. Un tal Jorge Saavedra Suárez llamó a unos amigos suyos, inclusive al capitán E.Roca, para dirigirse a los cuarteles y sublevarlos en contra del régimen de Busch. El capitán Roca puso sobreaviso a las autoridades militares sobre la "conjura". Después de la recepción, se dirigieron a los cuarteles del Calama donde, tras pronunciar un corto discurso en contra de Busch, fueron arrestados. Lo sorprendiente era que la policía inmediatamente arrestó a
76 Justo L. Op.cit., P. 104.
77 Lora G. Op.cit., p.310.
78 Lorini I. Op.cit., P.245.
79 La Calle.11.11.1938.
80 Según Waldo Alvarez, se juntó una suma considerable de 3.000 bolivianos. - Alvarez España, W. Op.cit.,
P.172.
personeros de izquierda.81 No seria tan sorprendente este hecho si no supieramos que el propio Marof, quien siempre afirmó su absoluta inocencia, sabia del peligro, dirigiéndose a la embajada de España, donde pidió asilo. Todos estos acontecimientos se produjeron simultáneamente, con una sincronización sorprendente. Si bien Marof declaraba su inocencia, la policia estaba convencida de que estaba mezclado en este acontecimiento82. Aunque toda esta historia da el aspecto de una provocación policial, todavia quedan muchas cuestiones oscuras83. Parece que era una tentativa para enfrentar a Marof y a Busch, y obtener motivos justificables para reprimir al PSOB, cuya influencia politica estaba en ascenso.
Pasada la noche, Busch asombra a todo el mundo por su indiferencia y expresa su desacuerdo con las acciones de la policia. Pero su entorno, los circulos de derecha del ejército -encabezados por el general Carlos Quintanilla- comenzaron a ejercer fuertes presiones sobre el Presidente para que expusara a Marof del pais o, por lo menos, lo relegara al interior. Inicialmente Busch cedió a los reclamos y decidió enviarlo a Sucre, pero luego, bajo la presión de los personeros de la izquierda, lo dejó en La Paz. La condición de Busch para tal "perdón" era el abandono, por parte de Marof, de la jefatura del PSOB, lo que era querido por dirigentes de otros partidos de la izquierda, temerosos del auge significativo del marofismo84. En fin, el resultado del "Putsch marofista" fue la represión de otros periodistas progresistas y politicos izquierdistas que fueron confinados a Beni85.
Aún después de estos acontecimientos, el PSOB seguia siendo el partido más grande de la izquierda. Los marofistas lo demostraron en el Segundo Congreso Obrero, que tuvo lugar del 22 al 30 de enero de 1939. Todas las discusiones en este se realizaban bajo la hegemonia intelectual de Valencia Vega y del propio Marof, cuyo lenguaje era ya mucho más moderado que en los años anteriores. Marof estaba decepcionado de las ideas de la revolución proletaria y del socialismo. Esta contradicción entre los principios revolucionarios declarados por el PSOB y la evolución hacia la derecha de su lider, condicionó la breve trayectoria politica de este partido.
En los 40 Marof todavia participaba activamente en la vida politica. Las relaciones de Marof con los nacionalistas revolucionarios del MNR se deterioraron cuando, en 1940, Marof
81 La Calle.26.11.1938.
82 Siempre impreciso, Marof recuerda este hecho de una manera muuy confusa: sostiene que el hecho tuvo lugar en el dia del siucidio de Busch (1939) y que su sucesor, el general Quintanilla, lo hizo perseguir por este hecho, Baciu, S. Op.cit., P.50.
83 Es muy curioso que el informante de la IC, quien tenia acceso a las informaciones procedentes de las fuentes confidenciales, inclusive del gobierno y de los grupos clandestinos, comunicaba a Moscú noticias sobre la directa participación de Marof en la "conspiración provocadora" - RCHIDNI. F.495, l.122, No. 1, H.45.
84 La Calle.30.11.1938.
85 SRE. 30 - 3 - 16.
publicó, en el periódico de derecha La Razón, un artículo donde expuso una fuerte crítica a los gobiernos de los militares socialistas (Toro y Busch), atacó al diario La Calle y al recién creado MNR. Su polémica en periódicos y en los escaños del Congreso con el líder movimientista Carlos Montenegro, lo condujo a una estéril lucha con el MNR.
Jugaría, sin embargo, un activo papel en el desenmascaramiento de las conspiraciones pronazis del MNR, (visitaba frecuentemente al embajador Wendler siendo una especie de agente doble). Marof negó las propuestas del embajador alemán de encabezar una revolución antiamericana en Bolivia e intervino en la prensa con denuncias contra los alemanes, el MNR, y La Calle. Estos, asu vez, denunciaron el recibo, por parte de Marof, de 30 mil bolivianos en la embajada suiza por las informaciones y servicios prestados y por organizar en Bolivia una "cruzada antinazi". Su panfleto El peligro nazi en Bolivia, fue impreso por cuenta del gobierno de Enrique Peñaranda (1940—1943). Con el golpe de Villarroel, tuvo que refugiarse en la embajada peruana y exilarse del país. Regresó a Bolivia después de la "revolución" de 1946. Los enfrentamientos de Marof tanto con el MNR, como con el PIR, lo llevaron a la alianza con la reacción oligárquica.
Su carrera política se acabó a finales de los 40 al servicio de los gobiernos reaccionarios de Enrique Hertzog y Mamerto Urriolagoitia. Atacaba desenfrenadamente al MNR, a los nacionalistas revolucionarios y, sobre todo, odiaba a Carlos Montenegro. En 1949 publicó una sátira contra los escritos de Augusto Céspedes y Carlos Montenegro, llamada El Experimento86. Pero sus creaciones ya no despertaban tanto interés como antes. En 1949 el PSOB se dividió en dos: el ala derecha se quedó con Marof; la izquierda antimarofista, formó La Liga Revolucionaria Socialista.87
En los 60 Marof colaboraba con el gobierno de René Barrientos. Sus últimos años de vida pasaron en Santa Cruz, olvidado por casi todos. Sus publicaciones de esta época —Biografía de Paz Estenssoro (1965), la autobiográfica La Novela de un Hombre (1967) y artículos sobre Gabriel René-Moreno- ya no provocaban el entusiasmo del público88. Era otra época y otra gente, nadie se interesaba por un viejo político y escritor, que en su tiempo había conmovido al país.
La vida de Marof es típica de los intelectuales izquierdistas latinoamericanos de la primera mitad del siglo XX. Su pasión por el marxismo, el indigenismo y por las ideas de la revolución nacional, fue pasajera y superficial. Estos intelectuales, algunos muy radicales en sus actitudes, nunca rompieron con el liberalismo y nunca superaron las limitaciones localistas y
86 Baciu, S. Op.cit., P.53.
87 Autodeterminación. Mayo - Julio, 1988, No.5. La Paz, 1988. P.148 - 150.
88 Son interesantes sus trabajos sobre Gabriel Rene-Moreno, Alcides Arguedas, Carlos Medinaceli - Marof T. Ensayos y crítica. Revoluciones bolivianas, guerras internacionales y escritores. La Paz, 1961.
nacionalistas en sus ideas. Para muchos, como para Marof, el marxismo ofrecia un refugio frente a la crisis orgánica e intelectual de la visión liberal-positivista de la sociedad y de la crisis politico-moral del Estado liberal. En realidad nadie profesaba el marxismo en su integridad como visión del mundo y, con el tiempo, muy facilmente dejaban de ser marxistas, olvidándose de sus convicciones revolucionarias, regresando al seno de la politica criolla y liberal. A veces llegando inclusive a colaborar con los régimenes más reaccionarios. La trayectoria de vida de Marof y la evolución de sus ideas demuestran las profundas contradicciones en las búsquedas ideológicas y politicas de la intelectualidad latinoamericana del siglo XX. El final de su vida en el olvido total, fue el resultado lógico de sus constantes virajes politicos. Muy justas son las palabras que sobre él escribió Guillermo Lora: "A lo largo de toda nuestra historia seguramente nadie como Marof llegó a convertirse en el depositario de las ilusiones de las tendencias y de las clases sociales más diversas. Y tampoco nadie como él llegó a desengañar de manera tan brutal a todo un pueblo".89
Recibido: 24 mayo 09 Aceptado: 12 agosto 09
89 Lora G. Op.cit., P.300.